Culmina el Festival de la Chaya
Así fue la noche del domingo 31 de julio en el “Festival de la Chaya Comida Ancestral”, donde locales y turistas pudieron degustar la amplia gamma de platillos elaborados en base a esta planta endémica de la región.
Sabores, texturas, colores, todos se combinaron para hacer de este festival algo realmente exitoso.
Situados durante el sábado 30 y domingo 31 de julio en la Calzada de los Frailes, concluyó este festival que por primera edición lo realiza el H. Ayuntamiento de Valladolid, Yucatá.
Durante su inauguración el alcalde Alfredo Fernández, señaló todas las propiedades que posee esta planta endémica.
Su riqueza en vitaminas, sus virtudes para mitigar sufrimientos de nuestros cuerpos, hay tanto que nombrar de esta planta de Chaya.
Pero eso sí, tiene su secreto para poder cocinarla, para poder elaborarla en diferentes platillos, si no lo realizas te puedes llevar varias picadas de sus puntas.
O hasta te puede lastimar la piel su resina, si no se tienen los cuidados adecuados para retirarla de la planta.
Un éxito total comentaron los expositores
A quienes tuvimos la oportunidad de charlar mientras atendían a sus clientes, fue con los expositores, que fueron restaurantes, familias dedicadas a la preparación de platillos elaborados en base a la Chaya.
Entre los expositores se contó con la presencia de personas que vinieron desde sus comisarías a exponer sus productos.
Hay quienes a momento elaboraron en ese instante las empanadas, los sopes, los panuchos, otros que elaboraron innovando como las pizzas, los pays y los jugos combinando la chaya con diferentes frutas.
La tradicional Vaquería, para cerrar con broche de oro
Al otro extremo de la Calzada de los Frailes, prácticamente en frente de Exconvento de San Bernardino de Siena, se encontraban las orquestas musicales que amenizaron el Festival de la Chaya.
Con varios ritmos y acordes de las jaranas los cuales hacen su distintivo para que las parejas en la pista, coordinen sus pasos y valseos a los ritmos musicales.
Los varones ataviados con sus alpargatas, pantalón blanco, guayabera blanca, su sombrero y su pañuelo rojo, elegantes acompañaban a las bellas mestizas para bailar.
Con flores en sus cabellos, con ternos de una gran variedad de colores, bordados a mano, con sus joyas de filigrana y su reboso, las mestizas lucían radiantes portando el traje típico de Yucatán.
Una noche especial que locales y turistas pudieron disfrutar, con espectáculos musicales, comida y muchos productos que hicieron del Festival de la Chaya todo un éxito.
Redacción y Fotografía: Enrique Oy Romero